La psicología tiene, dependiendo
del deporte, más o menos peso en el rendimiento de un deportista, pero en
cualquier caso se antoja como algo fundamental, ya que cuando buscamos máximo
rendimiento hay que entrenar todo lo que sea controlable, y el campo de la
psicología deportiva tiene habilidades entrenables. Según el libro “Sport
psychology for coaches” (Burton y Raedeke, 2008) una de estas habilidades es la
gestión de energía, relacionada con
el concepto de “arousal”. Arousal es
la activación (fisiológica y mental) del organismo. Es un continuo, que varía
desde el sueño profundo hasta la excitación intensa. El nivel de arousal varía
a lo largo del día y dependiendo de la situación, es decir, no es lo mismo
estar relajado escuchando música que estar en plena discusión con una persona.
En el ámbito deportivo cada deportista tiene que encontrar su nivel de arousal
adecuado a cada situación competitiva para poder rendir a su máximo nivel.
Arousal se explica con la hipótesis de “U invertida”. El continuo
comienza aumentando (activación del sistema nervioso central: liberación de
adrenalina, aumento de tensión muscular, frecuencia cardíaca, presión sanguínea
y frecuencia respiratoria, etc) desde niveles bajos de arousal hasta llegar a
una zona óptima de nivel de arousal moderado en la que el rendimiento (“performance”) será el máximo (zona
verde en la gráfica). Si el arousal sigue aumentando, el rendimiento decae. En
resumen, un nivel demasiado bajo de arousal hace que los deportistas estén
faltos de energía y activación porque no se producen los cambios fisiológicos
suficientes para dar un rendimiento óptimo, mientras que un excesivo arousal
podría producir, por ejemplo, problemas de tensión, de concentración o de
coordinación. Por tanto, cuando un deportista se encuentra en la zona a la
izquierda de la zona óptima (“underaroused”)
necesita aumentar su arousal para alcanzar la mencionada zona óptima y poder
así rendir a su mejor nivel. Esto puede conseguirse con charlas motivacionales
entre otras herramientas. Si por el contrario, el deportista se encuentra en la
parte derecha de la curva (“overaroused”),
debería disminuir su arousal, por ejemplo, con técnicas de relajación. Hay que
tener siempre en cuenta que la zona de óptimo arousal varía de un atleta a
otro, siendo para unos cuando el arousal es bajo y para otros cuando es alto.
Por tanto, esta hipótesis es sólo una guía que no se puede generalizar, pero
que sirve para entender el concepto de arousal y la importancia que tiene en el
rendimiento deportivo.
Cuando estamos en el vestuario de
un equipo antes de un partido, hay que saber que habrá deportistas que estén en
el nivel óptimo de arousal, otros por debajo y otros por encima, por lo que el
tratar de gestionar la energía, en este caso arousal, tiene que ser lo más
individualizado posible. Un ejemplo de esto serían los famosos discursos épicos
que se dan ante un equipo en el vestuario. Habrá a jugadores a los que les
venga bien, a aquellos que estén por debajo de la zona óptima, pero, ¿qué
pasará con los que ya se encontrasen en esa zona óptima o incluso “overaroused”?
Pues que su arousal se desplazará más a la derecha, alejándose de la zona óptima,
excitándolos demasiado y como consecuencia, impidiendo rendir al máximo de las
posibilidades. Sobre este tema de los discursos épicos os remito a la entrada
del blog de un amigo que ha escrito recientemente sobre el tema (http://blogrogerfont.blogspot.com.es/2013/12/pre-game-motivational-speeches.html).
El campo de la psicología
deportiva es, quizás, a uno de los que menos atención se le preste. La mayoría
del tiempo de entrenamiento es dedicado a la preparación física o
técnico-táctica, dejando a la psicología un poco de lado, pero hay bastante
margen de mejora en los deportistas en este aspecto. La gestión de energía es
una habilidad, que como todas, puede trabajarse con las adecuadas herramientas.
Esta entrada no es más que el inicio para hacer reflexionar sobre el tema.
Espero haber despertado interés.
Referencia: Burton, D., & Raedeke, T.D.
(2008). Sport Psychology for Coaches.
United States: Human Kinetics.
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